Tendencias Globales de Talento 2025 

Con los avances tecnológicos continuos, el mundo laboral en 2025 seguirá enfrentando una transformación inevitable. En este contexto, las organizaciones deben poner un mayor enfoque en sus empleados, rediseñando la forma de trabajar para adaptarse a las nuevas dinámicas tecnológicas, especialmente con la consolidación de la Inteligencia Artificial (IA).

Para una gestión eficiente de la plantilla, el informe Tendencias Globales de Talento 2024-2025 aporta claves esenciales basadas en las perspectivas de más de 1.800 responsables de Recursos Humanos (RR HH) sobre el rediseño del trabajo. En particular, el estudio identifica cuatro pilares clave de gestión: impulsar la productividad, fortalecer la confianza, promover la resiliencia y consolidar una cultura digital.

Este rediseño del trabajo comienza con el impulso de la productividad focalizado en las personas mediante la aplicación de la IA, la automatización y la mejora de las prácticas orientadas a la gestión por habilidades y competencias. Sin embargo, solo dos de cada diez empresas afirman contar con la agilidad necesaria en la gestión de talento para cumplir sus objetivos de crecimiento, lo que resalta la urgencia de fortalecer el desarrollo de los empleados. De hecho, la falta de reskilling y upskilling se perfila como la mayor amenaza al crecimiento empresarial.

Además, la inminente reforma legislativa sobre transparencia salarial se ha convertido en una de las principales preocupaciones para los responsables de RR HH. De hecho, el 62% de las compañías están trabajando en mejorar la competitividad de los programas de retribución para atraer y retener talento, y un 41% están trabajando en optimizar la comunicación de los programas de compensación total. Para abordar estas preocupaciones y fortalecer la confianza, las organizaciones deben adoptar medidas que trasciendan el cumplimiento normativo, aprovechando la potencia de herramientas como la IA generativa.

A medida que las compañías se enfrentan a nuevos desafíos regulatorios y tecnológicos, también deben centrarse en construir organizaciones resilientes que fomenten culturas enfocadas en la salud. Para 2025, reforzar el "sistema inmunitario" empresarial implica abordar factores como la frustración de los empleados al gestionar sus beneficios sociales. El 47% de los responsables de RR HH priorizan mejorar el apoyo a la salud mental para combatir el agotamiento, mientras que más de la mitad diseñan el trabajo con el bienestar como eje central.

Por último, en este mundo cambiante impulsado por la IA, otro pilar clave para los responsables de RR HH es diseñar organizaciones digitales donde las personas prosperen. Crece la preocupación de los ejecutivos por los riesgos de infrautilizar las nuevas tecnologías, lo que subraya la necesidad de equilibrar los avances tecnológicos con el enfoque humano en la transformación digital. No es casualidad que la inversión en avances digitales para RR HH figure entre las principales prioridades del C-Suit.

Así, en un 2025 marcado por la IA y la transformación digital, las organizaciones deben rediseñar el trabajo centrado en personas, fomentar culturas resilientes y priorizar el bienestar de su plantilla. La transparencia salarial, el reskilling y el equilibrio entre la tecnología y las personas son esenciales para su crecimiento. La clave estará en alinear estrategias de talento con la innovación para garantizar competitividad y confianza.