Estudio de Mercado de Desvinculaciones 2025
Rosa Farré
En un mundo marcado por una disrupción imparable y cambios que se aceleran sin pausa, las empresas se enfrentan a un desafío sin precedentes: adaptar sus plantillas con agilidad y precisión para responder a las demandas de un mercado en constante evolución. La eficiencia ya no es una opción, sino una necesidad estratégica que puede determinar la supervivencia y el éxito de una compañía.
Los planes de rentas o prejubilación siguen siendo la herramienta más eficaz y menos invasiva para gestionar las plantillas, especialmente entre los empleados de mayor edad, subrayando su papel fundamental en la reestructuración estratégica del talento y en el reconocimiento del valor de quienes han dedicado años de servicio a la organización.
Para aportar claridad y ofrecer información práctica, Mercer ha lanzado la nueva edición del Estudio de Mercado de Desvinculaciones 2025: planes de renta e indemnizaciones. Este análisis exhaustivo se basa en 230 procesos de desvinculación de 143 empresas inmersas en reestructuraciones en los últimos años, proporcionando una rigurosa visión de las tendencias actuales y las mejores prácticas.
Destaca un cambio significativo en la forma en que las empresas instrumentan las prejubilaciones. Aunque el 41% de las organizaciones aún recurre a despidos colectivos, un creciente 26% opta por acuerdos voluntarios. Se trata, sin duda, de un aumento notable en comparación con el 14% registrado hace cinco años. Esta tendencia refleja un giro hacia soluciones que fomentan la paz social y mejoran la reputación corporativa. Una gestión humana y responsable de las desvinculaciones contribuye de manera efectiva a la gestión estratégica de la plantilla.
El siguiente grafico muestra la distribución de los procedimientos laborales para instrumentar prejubilaciones según las diferentes ediciones del Estudio de Mercado de Desvinculaciones de Mercer.
Las prejubilaciones instrumentadas mediante el procedimiento laboral del despido suelen calcularse sobre el salario neto; un 80% de las empresas así lo hacen, siendo el porcentaje de complemento más común el que oscila entre el 75% y el 80% del salario neto total. En cuanto a la distribución sectorial, los sectores tecnológico y financiero son los que más frecuentemente implementan prejubilaciones vía despido colectivo. Por otro lado, los sectores de gran consumo e industrial predominan en la aplicación de prejubilaciones vía despido individual.
En cuanto a los planes de rentas instrumentados a través del procedimiento laboral de acuerdos voluntarios, el estudio pone de manifiesto que el 70% de las empresas los calculan sobre el salario bruto total. En este caso, el porcentaje más utilizado se encuentra entre el 70% y el 75%. Los sectores que recurren más a esta opción son el sector químico y farmacéutico y el sector servicios.
Más allá de los datos cuantitativos, el estudio destaca las siguientes tendencias:
- Se observa una clara preferencia por las salidas voluntarias, apoyadas en una comunicación transparente y clara que permite a los empleados evaluar sus opciones de desvinculación con plena confianza.
- Se otorgan beneficios adicionales, tales como seguros de salud, contribuciones a planes empresariales y otros incentivos, con el propósito de enriquecer el paquete ofrecido y evidenciar un compromiso integral con el bienestar de los prejubilados
- Se proporciona información personalizada sobre la jubilación, así como un acompañamiento individualizado dirigido a los prejubilados, con el objetivo de orientarlos en las diversas gestiones que deben realizar ante los distintos organismos desde el momento de la desvinculación hasta la efectiva jubilación.
En definitiva, estas tendencias marcan el camino hacia una gestión de las desvinculaciones centrada en las personas y que fortalece la reputación y el compromiso de las organizaciones en un entorno empresarial cada vez más exigente.